lunes, 29 de diciembre de 2014

Nunca olvido.

Cuando despiertan esos labios, y se abren esos ojos, procuro que cada flor que cojo sea para ponerte roja, y si cada lirio que escojo es para verte más fresca, a mi parecer tu serás siempre más hermosa, que cosa, que siempre te he querido, tu recuerdo está grabado a fuego vivo, vivo pero hecho pedazos, siempre que quise no pude tenerte entre mis brazos yo, si la fuerza sale del pecho es porque ya entró humo verde, pensar en ti me enflaquece, eres como ese niño cuando crece, que está lleno de ilusiones y las pierde a los trece, que cuenten, el tiempo se me escapa entre los dedos, los te quiero que pensé y aunque no te fui sincero, nunca probé esos labios que dicen saber a caramelo
Entrego, parte de mi alma al juego, juego amañado por la estampa que reluce tu cabello, y tus cabreos se pasan como si fueran un destello, tengo aquí en mi mano una foto de tu recuerdo, no se lo que pienso, no se lo que piensas, si piensas en mí ¿será bonito lo que piensas?, no se lo que digo, no se lo que dices, si dices lo que digo será que nos atraemos, mientras, tú buscas sentido a la vida, mi vida es buscarle un sentido contigo, si de verdad piensas que las letras no me motivan, el verso triste por ti lo dejaría en el olvido, dicen que no hay vaquera como la de la Finojosa, pero tu eres más fina y a la luz más hermosa, no valdría contigo recoger tu dulce fruto, porque tú no envejeces eres un diamante en bruto, esto es lo que escribo cuando no tengo canutos, tus ojos negros parecen estar de luto, como una viuda que no asimila que está sola por siempre, pero ya sabe que su amor está casado con la muerte
¿Es eso lo que quieres? ¿Qué mi amor muera? Si eso ocurriera escribiría con tinta negra, si es lo que prefieres no hay problema desaparezco, nunca olvido al cuerpo que pertenezco, ni al lecho que perteneceré, ni al muerto que llevo dentro.

domingo, 28 de diciembre de 2014

La muerte y el avaro (1500), de El Bosco

http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/4/48/Jheronimus_Bosch_050.jpgEn una habitación cómoda, duerme un mal afortunado,
al que la fortuna por desgracia le ha condenado,
a un lado un ángel, al otro la muerte,
le señalan al crucifijo pero su avaricia es más fuerte

Puede elegir, la salvación o la muerte,
el demonio le ofrece un salario, pero alguien en la puerta quiere verle,
le está esperando, con la guadaña en la mano,
parece que el ángel negro cree que le ha tocado

------------Diversas situaciones------------

1.El avaro escoge el dinero, el demonio se hace más fuerte,
la avaricia te ha condenado al mundo de los inertes,
has cometido el pecado, ya no quieren verte,
el único infierno que posee dinero es el terrestre

2.El hombre reconoce, como pecador que fue,
que el dinero no lo es todo y cree en Dios su único rey,
el ángel blanco se compadece, y le acerca el crucifijo,
buen padre es Dios, y él ha reconocido ser buen hijo.